En entrevista exclusiva para “De Todo Farándula”, conversamos con el director de dicho filme, Miguel New, quien describe a la cinta como un viaje interno a la selección y el secreto de su cambio. Cambio que le proporcionó a Venezuela ganarse el respeto del continente a nivel futbolístico. Tras seis años de seguimiento y casi 400 horas de grabación, el resultado fue una película de 90 minutos (como un partido de fútbol) y su estreno está previsto para este próximo 28 de agosto.
Conociendo al director
Miguel New (Edo.Mérida-Venezuela) tras haber estudiado historia y otras áreas e incluso ser un practicante del fútbol desde pequeño, con 23 años se adentro en entrenar el deporte para ser futbolista profesional, pero al ver que sus condiciones no eran tan óptimas, opto por estudiar Sonido en la Escuela Internacional de San Antonio de los Baños (Cuba) mas por e
l renombre de dicha institución que por estudiar Cine como tal. Hijo del cineasta Michael New (Florentino y el Diablo, Cubagua) permaneció allá durante 2 años y luego regresa a Venezuela (2000) y realiza su primer cortometraje “Cabeza ‘e vaca”, el cual incluso participo en varios festivales internacionales.Tras esta experiencia, le tomó gusto a su trabajo y decide junto a compañeros de la Escuela de Medios Audiovisuales en Mérida formar un colectivo que cuente historias, es decir, que cada iniciativa o inquietud que este grupo tuviese, lo plasmarían en formato cine y así desarrollar lo que seria a posteriori su gran pasión (el cine), ya que reúne un poco de todo: historia, ciencia, tecnología, lo social y humano.
Camino a la película
Tras las cuatro victorias seguidas de la Selección Nacional (Vinotinto) en el 2002, Miguel y sus compañeros entraron en alerta al ver que algo estaba pasando allí. El hecho les entusiasmo tanto que pensaron que esto no podía quedarse así y fue cuando se trazaron hacer un filme de este evento histórico para el país. Desde un principio estuvieron claros en que la columna vertebral de la película seria el secreto de ese cambio, que ocurrió allí para obtener este resultado y ello suponía un viaje intimista a la selección y sus técnicos. Para ese entonces el boom vinotinto no existía como hoy día, ni la publicidad y mercadeo hoy reinante, ni mucho menos la popularidad actual.
La filmaciòn se basó en acompañar a la selección en todo su periplo de pre clasificación para el Mundial de Fútbol Alemania 2006 y comienza cuando Richard Páez asume como Director Técnico hasta el desarrollo de la Copa América 2007 y parte de la pre clasificación para Sudáfrica 2010. Al principio hubo reserva por parte de la selección (jugadores) y técnicos a que se les grabara, pero poco a poco esto fue mermando hasta el punto en que no existió un límite severo para evidenciar las emociones, frustraciones, alegrías, tristezas, incertidumbre y todo cuanto puede ocurrir en el deporte. Luego éramos parte de ellos y llegaban a extrañarnos e incluso su apoyo y solidaridad fue compartida.
Miguel New describe a este proceso como una montaña rusa de emociones; como lo es el deporte mismo. “Nuestro relato es intimo, de fondo. La idea hoy por hoy de la Vinotinto es algo errónea, no completa. Es una cara que no refleja lo que en realidad es la Vinotinto y que posee un mensaje que no ha llegado al pueblo venezolano. El pueblo de Venezuela necesita de este mensaje vinotinto porque la Selección llegó a ser un ejemplo para todo el país, un ejemplo de cambio, transfo
rmación, de que las cosas si se pueden lograr con constancia y trabajo; el venezolano aun no ve este mensaje en su verdadera dimensión, se ha quedado en la euforia de los goles y el boom publicitario”.Por otra parte, New comenta: “…la fuerza de la película esta basada en la manera de entregar este mensaje, ahora es que la Vinotinto le va a hablar al país y lo va a hacer a través de emociones muy fuertes. El público notará eso: no se trata de obtener la sola clasificación para un Mundial de Fútbol, es el cambio de la Vinotinto como tal y el país es testigo de esto”. El cristal a través del cual los espectadores serán testigos de esto es la fanaticada, el público, las gradas, el furor, las pancartas, el ritmo propio de un stadium de fútbol. “Estos muchachos (los jugadores) decidieron algo muy difícil de asumir en este país: ser futbolistas. Lo hicieron por puro coraje y full corazón”, sentencia su director.
ero o efectivo) al participante-, se hizo de una popularidad que no se veía en TV desde los años ’80 con el famoso formato de “El Juego de la Pirámide”, que ya es bastante decir.
?” es el otrora animador y presentador Eladio Larez, hoy día presidente de dicha planta televisora y a través de los años que lleva el exitoso programa se ha hecho acreedor de numerosos premios y reconocimientos por varios sectores de la sociedad del país e instituciones. Varios han sido los millonarios que han arrojado este programa en nuestro país y actualmente el premio tope que entrega es de 200 mil bolívares fuertes o 200 millones…”de aquellos”, como dice siempre el Dr. Larez al concursante.